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Taller Ambulante Pädi
Aprendiendo sobre la elaboración de la “melga”, pedazo de tierra que se marca para sembrar, uno de los métodos tradicionales de trabajo de los chinamperos del pueblo originario de San Pedro Tláhuac.
  • Autora: Edith Martínez

    Fecha: Sábado 25 de febrero de 2023.

    Lugar: San Pedro Tláhuac.

Introducción 

El último sábado de febrero, la brigada “Semillas de Colaboración” realizó trabajo voluntario en San Pedro Tláhuac, uno de los siete pueblos originarios que ubicado en la alcaldía del mismo nombre; y que de acuerdo con sus pobladores, aún se destaca por preservar la zona chinampera, cuyos productos primordialmente hortalizas, se siguen comercializando en mercados locales y autoconsumo.

¿Cómo fue tu experiencia?

Personalmente, siempre ha sido muy enriquecedor visitar el trabajo de las chinampas y lo extraordinario que es este sistema de siembra que ha existido desde la época prehispánica, y que a pesar de la urbanización que se ha dado en la zona, aún los pobladores de San Pedro preservan, trabajan y cuidan. 

A pesar de que aún nos encontramos en temporada invernal, aunque no parezca, ya que ha empezado a hacer calor en esa zona, las personas de la chinampa, nos compartieron que todavía no es tiempo de siembra, no obstante, durante la actividad de esta brigada se trabajó y apoyó en la elaboración de las “melgas” para preparar la tierra para la futura siembra.

Fue muy interesante conocer cómo se realiza este proceso, el cual consistió en hacer un recuadro aproximadamente de 10x10; posteriormente todos las y los brigadistas con las herramientas y utensilios adecuados, colaboramos en aflojar la tierra en dicho recuadro y mezclar abono de caballo u otro para enriquecerla ya que de acuerdo a nuestros anfitriones este abono tiene muchos nutrientes; luego se aplana la mezcla del abono junto con la tierra y la dejamos lista para que puedan sembrar los germinados de hortalizas tales como  brócoli, cilantro, epazote, etc, los cuales nos indicaron que se están elaborando y serán los que se sembrarán y cosecharán.

Durante esta jornada, todxs participamos encargar los sacos del abono de caballo y composta para llevarlos donde estábamos haciendo las “melgas” y aflojamos la tierra para siembra.

El trabajo fue un poco cansado, ya que al menos en mi caso no estoy acostumbrada a trabajar en el campo, pero estoy convencida que cada vez que participó en un brigada de este tipo es cuando valoró y respetó a las personas que lo hacen todos los días para sobrevivir y dar sustento a sus familias, e incluso gracias a su trabajo algunos de estos productos llegan a mi mesa, y que a pesar del clima (calor, frío, lluvia) tienen que trabajar –como pude observar– en la chinampa vecina, donde había un señor de edad adulta trabajando y limpiando su terreno. Aprendí que no todas las zonas chinamperas cuentan con canales, en este caso, me recordaron a las pequeñas parcelas que he visitado en otros lugares.

También ayudamos a limpiar y recoger lonas y plásticos en una parte del terreno de la chinampa, que se utilizará para la construcción de un “temazcal” (casa que se suda - ritual ancestral), y después todos convivimos tomando un pequeño almuerzo, una vez que terminamos de comer, nos despedimos agradeciendo a los anfitriones por permitirnos apoyar en este trabajo y continuar colaborando en el futuro en actividades de siembra o cosecha en la chinampa.

¿Qué me dejó esta brigada?

La experiencia fue enriquecedora y de mucho aprendizaje, me emociona tener contacto con el campo y lo que implica la tierra: sentirla, olerla; y como para los habitantes de Tláhuac, es parte de su vida cotidiana y la estrecha relación que tienen con ésta; me gustó mucho aprender sobre “las melgas”.

Me motivó saber que actualmente se está recuperando en la zona el valor e importancia de las chinampas, que se está apoyando con el fortalecimiento de capacidades para que las mujeres de Tláhuac, retomen el trabajo de la chinampa, ya que son ellas las que la cuidan, y que sus habitantes –principalmente las generaciones jóvenes– comprendan el valor que tiene la tierra y lo importante que es continuar trabajando en ella, ya que sí desaparece este entorno, también se debilitarán algunos elementos sociales de este pueblo originario; asimismo, el conservar ese espacio dentro de la gran urbe, contribuye a contar con servicios ambientales para la zona que benefician a todos sus pobladores. 

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